La diabetes tipo 1 es una enfermedad crónica, que para los pacientes implica depender para toda la vida de inyecciones diarias de insulina. Mucha gente padece esta dolencia en el mundo. Solo en Suecia se diagnostican aproximadamente dos casos nuevos diarios.
La insulina es una hormona producida por las células beta en el páncreas, y que se necesita para prevenir un aumento dañino del nivel de glucosa en sangre.
La causa exacta de la diabetes tipo 1 no se conoce aún; sin embargo se la considera una enfermedad autoinmune, un trastorno que sucede cuando nuestro propio sistema inmunitario ataca y destruye por error células sanas del cuerpo. En la diabetes tipo 1, una infección y/o factores desconocidos desencadenan probablemente el ataque de las células inmunitarias, que pasan de lo que podría considerarse como una respuesta normal y aceptable a extralimitarse de forma nociva, lo que finalmente lleva a una producción insuficiente de insulina.
Una nueva investigación, realizada por el equipo de Kailash Singh, de la Universidad de Uppsala en Suecia, muestra un progreso prometedor en el uso de una citoquina antiinflamatoria para el tratamiento de la diabetes tipo 1. Los resultados indican que la administración de interleucina-35 (una proteína hecha por células inmunitarias) a ratones con diabetes tipo 1, revierte o cura la enfermedad al mantener un nivel normal de glucosa en sangre y asegurar la tolerancia inmunitaria.
Fuente: noticiasdelaciencia.com