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Los funcionarios “no declarados de inteligencia” tienen siete días para irse del país
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Turnbull y Bishop denuncian la “naturaleza escandalosa” del ataque
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Australia es el último en culpar a Rusia del intento de asesinato de Skripal
Australia ha anunciado este martes que expulsará a dos diplomáticos rusos en una respuesta coordinada con Reino Unido y otros aliados contra Moscú por el intento de asesinato con un agente químico del exespía ruso Sergei Skripal y su hija.
La decisión, adoptada tras recibir información británica, afecta a dos funcionarios “no declarados de inteligencia” a los que se ha dado siete días para que abandonen el país, han indicado en un comunicado el primer ministro, Malcolm Turnbull, y la ministra de Exteriores, Julie Bishop.
Ambos han denunciado la “naturaleza escandalosa” del ataque, “el primer uso ofensivo de armas químicas en Europa desde la Segunda Guerra Mundial”, y que este se hiciera en una zona poblada que puso en peligro “innumerables miembros de la comunidad”.
“Un ataque de este tipo no puede ser tolerado por ninguna nación soberana. Apoyamos enérgicamente las peticiones a Rusia para que revele en su totalidad su programa de armas químicas de acuerdo con la ley internacional”, ha indicado el comunicado.
Con el anuncio, Australia se suma a los anuncios hechos a la víspera por parte de Estados Unidos y numerosos aliados occidentales del Reino Unido sobre la expulsión de decenas de diplomáticos y funcionarios rusos en represalia por dicho ataque que se atribuye a Moscú.
Turnbull critica a Rusia
En una rueda de prensa posterior, Turnbull ha condenado el ataque y ha asegurado que la medida adoptada persigue enviar “un mensaje claro e inequívoco” a Rusia.
“No hacer nada solo alentaría más tentativas de socavar el orden internacional basado en la ley sobre el cual depende nuestra seguridad y prosperidad”, ha dicho Turnbull.
“Fue un ataque contra todos nosotros, contra todo un país que respeta el estado de derecho y este es el motivo por el que hoy hemos tomado esta decisión”, ha añadido.
Australia impuso sanciones económicas a Rusia en 2014, después de la anexión rusa de Crimea, y las reforzó tras el derribo del avión de Malaysia Airlines en el este de Ucrania atribuido a rebeldes prorusos.
Se espera una respuesta rusa
Turnbull ha citado estos casos y los intentos de manipulación de elecciones en países de occidente como muestra del “patrón de osadía y agresión” del gobierno ruso.
“Que Rusia sea miembro del Consejo de Seguridad de la ONU, el organismo a cargo de garantizar la seguridad global, hace que esta violación de la ley internacional sea especialmente peligrosa y chocante“, ha asegurado el mandatario.
En la misma comparecencia, Bishop ha dicho que comunicó esta misma mañana al embajador ruso la decisión de expulsar a los dos funcionarios y aseguró que espera que Moscú responda expulsando diplomáticos australianos.
