Seis policía encima y alrededor de un detenido en una celda de la policía belga.
Además, lo que parece el saludo nazi de una de las agentes.
Debajo de los policías, Jozef Chovanec, eslovaco, de 38 años. Murió en el hospital pocos días después de la intervención de estos guardias.
Ocurrió en febrero de 2018 en el aeropuerto de Bruselas Sur.
Desde entonces hay una denuncia judicial, paralizada, sin avances.
La viuda de Chovanec ha difundido estas imágenes.
Solo ahora la policía belga ha reaccionado, no para dar explicaciones, sino para quejarse por la fuga de información.
La abogada de la viuda del fallecido Ann Van De Steen, explica:“Mi clienta quiere saber qué pasó y cómo murió su marido, así se podría haber evitado, porque estas imágenes muestran una agresividad en tromba”.
Chovanec iba a embarcar en un vuelo a Bratislava.
La policía le detuvo por lo que defiieron como “comportamiento agitado”.
Tras horas de aislamiento en una celda de tamaño mínimo comenzó a golpearse la cabeza contra la pared.
El comandante adjunto de la policía belga André Desenfantsve, ve más grave la publicación del vídeo, la fuga de información, que la intervención policial que acreditan la grabación_: “Lo primero que me sorprendió fueron las imágenes que vi y de las que no tenía conocimiento. Yo no huyo de mis responsabilidades, no dimito, he pedido que me suspend an provisionalmente de mi cargo, que me siento incapaz de ejercer, sobre todo por la investigación por la fuga de información interna”._
Amnistía Internacional ha exigido “una investigación exhaustiva”.
El gobierno eslovaco ha instado a las autoridades belgas a que presten la máxima atención a explicar la muerte del detenido.